Ahora, desde aquí, me siento muy pequeña. Tumbada en el suelo, mirando hacia un cielo azul. Y pienso, que lejos tiene que estar el final del cielo que veo, tan lejos como las miles de millones de estrellas que se encuentran mas afuera, pero menos lejos que otros universos, y más lejos que él y yo, seguramente. Desde aquí también veo otros árboles, también más grandes que yo, más cerca del final del cielo que yo, pero menos cerca que el sol.
Sentirme pequeña viene siendo rutina, pero cada día que pasa no me siento más pequeña, me siento igual de pequeña que el día anterior, pero sé que el día que viene puedo ser un poquito mas grande.
Desde aquí todo se ve diferente, más grande, más inmenso, se ve como si fuese la más pequeña de las hormigas y mirase a mi alrededor. Con el tiempo todo esto me quedará pequeño, así que disfrutaré de ello mientras me quede grande, mientras lo vea grande, ya habrá tiempo de verlo pequeñito.
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